ODONTOFOBIA: 8 tips que te ayudarán a superarla.

A pesar de los avances en Odontología tanto en el instrumental como en los procedimientos terapéuticos y el extenso conocimiento que tenemos sobre el miedo dental y sus consecuencias, la prevalencia del miedo dental se ha mantenido relativamente constante en los últimos 20 años. Estamos ante un problema global y ampliamente extendido tanto en población infantil como adulta y que tiene graves repercusiones sobre la salud oral y la calidad de vida de las personas que lo padecéis.

Este fenómeno se explica por la dinámica del círculo vicioso, pero ¿Qué quiere decir esto?

Es muy sencillo, se ha encontrado que las personas con miedo dental presentáis una menor frecuencia de visitas odontológicas y una mayor tendencia a cancelar las citas, lo que se puede interpretar como una conducta de evitación o escape característica de la ansiedad.

Todo esto puede conllevar al agravamiento de tu estado de salud oral. ¿Por qué?

En definitiva, si tienes miedo dental acudirás a consulta sólo cuando la atención odontológica sea ya obligada debido al dolor o gravedad de los síntomas experimentados.

Llegados a este punto, lo más probable es que necesites un tratamiento más invasivo motivado por la urgencia, lo que contribuirá probablemente a que tengas que experimentar un tratamiento más aversivo que refuerce tus pensamientos negativos, favoreciendo el mantenimiento de la ansiedad dental.

¿Qué podemos hacer para romper con este círculo vicioso y superar el miedo dental?

• Habituación de las respuestas de ansiedad o la inoculación frente a ellas: habría sido ideal que desde pequeñ@ hubieras visitado al dentista de forma periódica para que simplemente te revisara y aplicara tratamientos preventivos con los que habrías conseguido acumular numerosas experiencias positivas, porque son tratamientos muy sencillos con los que se puede adquirir un hábito y asumirlo como tal, dándote la oportunidad de desarrollar habilidades de afrontamiento. Y si en alguna ocasión, la experiencia resultara algo menos agradable, el cerebro lo asimila como algo puntual, anormal porque siempre había ido bien e impediría que se desarrollara el miedo dental. Si no ha sido así, ahora es el momento de comenzar con el hábito, revisiones periódicas cada 6 meses para que cuando empiece alguna patología sea muy pequeña y el abordaje sea muy sencillo.

• Evita cancelar citas: no huyas, lo sencillo se transformará en algo más complejo y más difícil de superar. Si frecuentas al dentista cada medio año, es más fácil controlar la situación.

• Piensa que tienes el control de la situación: en la clínica siempre se utiliza una señal que es la de levantar la mano si quieres hacer una pausa, decirle algo al dentista, etc. Tienes que ser consciente de que si quieres detener el tratamiento, que vaya más despacio, preguntarle cualquier cosa..¡Puedes hacerlo! Tú tienes el control de la situación con un simple gesto de levantar la mano, el dentista se detendrá para satisfacer tus necesidades.

• Evita la sensación de impredecibilidad: hasta que no estés convencido de que sabes lo que te van a hacer, cómo lo van a hacer y de que no hay razones para temerlo, no se comenzará el tratamiento. El dentista conoce las técnicas a emplear ante esta situación.-Técnica de decir, mostrar y hacer. Puedes preguntar todas las veces que lo veas oportuno hasta que, de un modo racional, entiendas que es algo sencillo y que no debes temer a esa situación.

• Utiliza técnicas de relajación: el dentista te ayudará a controlar la ansiedad haciendo ejercicios breves de respiración, ayudándote a respirar con él. Además, puedes abrir y cerrar los puños, abrir y cerrar los ojos para conseguir relajarte.

• Piensa en algo agradable: evita los pensamientos negativos, pensando que todo te va a dolor porque no es así, la odontología ha avanzado mucho y ya ningún tratamiento debería ser doloroso pero la mente es muy potente y puede hacer, incluso, que nos creamos que nos está doliendo. ¡Libérate de los pensamientos negativos, mente en blanco o pensamientos agradables!

• Busca a un dentista de confianza: debes de sentirte cómod@, bien atendid@, sin prisa. En clínica Baracco sabemos que con los pacientes que tenéis miedo al dentista hay que dedicaros tiempo porque la ansiedad necesita un espacio mínimo en consulta para conseguir la desensibilización. Mostramos cariño, comprensión, aplicamos las técnicas anteriormente descritas y somos muy pacientes. ¡Juntos podemos superarlo!

• Premedicación: en algunas ocasiones, el dentista puede prescribirte algún fármaco o recomendarte algún producto natural para ayudarte un poco a relajarte durante el tratamiento.

 

Piénsalo, como todas las fobias, necesitan su proceso pero lo más importante es afrontar la situación y no dejar que te limite la vida. ¡Estamos para ayudarte!

Si tienes cualquier duda puedes dejar un comentario o pedir cita en clínica Baracco y ¡Cuidaremos de ti!